sicPor momentos parece ser que hay una cultura o moda por ir verde o ecológico, sin embargo si miramos hacia atrás en el tiempo podremos darnos cuenta de que no se trata de una moda, sino que hay un proceso que ha comenzado y “se viene cociendo” (por decirlo de alguna forma) desde hace mucho tiempo.

Los arquitectos siempre han diseñado y proyectado las edificaciones por levantar, pero hoy en día esto no es suficiente cuando se habla de Bioarquitectura, no se trata de construir sin más, sino que implica una necesidad básica de que cada obra cuente con componentes que contribuyan a la salud de quienes habitarán esas propiedades, aplicando políticas que contemplen aspectos como:

La eficiencia energética de la vivienda
Reducir al máximo los residuos y contaminantes utilizados
Promover el uso de materiales naturales o respetuosos con el medioambiente
Implementar sistemas bioclimáticos y sostenibles
Considerar las emisiones de CO2 en el ambiente
La bioarquitectura está compuesta por diversos elementos que, a medida que se vayan incorporando y formen parte de todas las construcciones, harán sin duda que el mundo sea otro. Porque justamente el principio de la arquitectura reside en preservar la vida de quienes habitan la propiedad a la vez que el hábitat en él que ésta se encuentra, es una combinación que debe contemplar lo humano y lo medioambiental.

Una casa con eficiencia energética de la mano de la Bioarquitectura

Un modelo en auge y muy requerido por estos días que combina a la perfección con la Bioarquitectura es el de las casas prefabricadas, los motivos para optar por éste tipo de construcciones no son pocos, entre muchos podemos citar por ejemplo:

El coste, son muy económicas
Pueden construirse de varias plantas o ser solo una edificación horizontal
Los diseños son diversos e incluso se pueden personalizar
Los materiales y el tipo de construcción son respetuosos con el medioambiente
Reducen el impacto de emisiones CO2
Se pueden trasladar a otra parcela, ciudad, etc.
Se pueden añadir módulos para ampliarlas sin que esto sea una complicación
La bioarquitectura apuesta por casas más funcionales, habitables, cómodas y sanas. Persigue la eficiencia energética implementando por ejemplo numerosas ventanas de cristal y puertas del tipo acordeón acristaladas, que nos permiten cerrarlas cuando solo deseamos capturar la energía del sol para que nos proporcione calor o abrirlas de forma amplia, para crear un espacio diáfano por el que circule el aire fresco y la ventilación ambiental.

Sistemas de recogida de lluvia, aislamiento de alta densidad así como claraboyas solares forman parte del conjunto edilicio y a todo esto hay que sumarle que muchos propietarios de casas prefabricadas o de madera ecológicas también dejan un espacio de terreno disponible para convertirlo en un huerto orgánico, que hace que la vivienda sea aún más eficiente y auto-sostenible si se quiere.

Para terminar con una buena noticia y muy actual, compartimos un anuncio de la Agencia Internacional de Energía de París que dice que para el año 2020 se prevé que un 26% de la energía mundial proceda de fuentes renovables, algo que al día de hoy se sitúa en un 22%.

Fuente: Casas Modulares