Se realizó la primera auditoría ambiental de un edificio público en Córdoba, el cual arrojó resultados preocupantes sobre el excesivo consumo de energía y de agua. Por esta razón, se tomarán ciertas medidas con el objetivo de que se reduzcan los gastos y se concientice acerca del medio ambiente.
El Instituto de Arquitectura Sustentable del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Córdoba auditó un Centro de Participación Comunal (CPC) de la ciudad de Córdoba, midiendo 15 parámetros vinculados al consumo de agua, consumo y demanda de energía, cobertura verde, iluminación, climatización y emisiones de gases de efecto invernadero.
El resultado fue bastante desfavorable, obteniendo una categoría “F” para el edificio; la segunda peor según una normativa de la Unión Europa, debido a sus emisiones de gases de efecto invernadero provocadas por el consumo energético.
Sin embargo, esto no ocurre únicamente en este edificio en particular, sino que se puede extender a casi todas las oficinas públicas.
De todas maneras, existen soluciones para mejorar la eficiencia energética, el uso del agua, entre otras.
Actualmente, el 56% de la superficie del CPC estudiado tiene cobertura vegetal gracias a la presencia de unos 70 árboles. El índice de cobertura debería ser de 74%, es decir, que habría que agregar 30 árboles más para alcanzarlo.
Para reducir el consumo de agua, se deberá implementar un sistema de doble descarga en los inodoros, reductores de caudal en las canillas y un dispositivo en los mingitorios, que se programa para que tire un litro de agua por día. De esta forma ser podrán reducir hasta 80% del consumo de agua.
El edificio administrativo consume 75% de su energía para refrigerarse; mientras que el edificio cultural usa el 75% para calentarse por un mal aislamiento en el techo. Las soluciones para reducir el consumo de energía por climatización son colocar burletes y doble vidrio en las aberturas y plantar árboles para evitar el asoleamiento. También se puede gestionar una mejor eficiencia con un protocolo de uso del edificio por parte de un encargado.
El 14% de la energía se destina a iluminación en el edificio estudiado. La auditoría determinó que, a pesar del alto consumo, es insuficiente porque hay un mal diseño y disposición del mobiliario. Esto se podría solucionar con sólo cambiar los muebles y las luces de lugar e implementar artefactos con louver en los tubos fluorescentes para aumentar la luminosidad.
En cuanto a la calefacción, un buen sistema evitaría el uso de caloventores, equipos eléctricos de alto consumo que son utilizados por un tercio del personal, según la encuesta realizada para la auditoría.
Fuente: La Voz del Interior