El gasto en construcción en Estados Unidos subió durante el mes de noviembre a un máximo histórico con eje tanto en la obra pública como privada. La fuerte mejora dio impulso también al índice de actividad fabril que subió más que lo esperado en diciembre, impulsado por una aceleración de los pedidos de los comercios. Estos datos dan una nueva señal del fuerte impulso que logró la economía a fines de 2017.
El Departamento de Comercio dijo que el gasto en construcción subió un 0,8% a un máximo histórico de u$s 1,25 billones en noviembre. En la comparación interanual, escaló un 2,4%.
En noviembre, el gasto en proyectos residenciales privados escaló 1% a su nivel más alto desde febrero de 2007.
El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM), en tanto, dijo que su índice nacional de actividad fabril escaló a una lectura de 59,7 el mes pasado desde 58,2 en noviembre. Una lectura superior a 50 indica crecimiento en las manufacturas, que responden por alrededor de un 12% de la economía estadounidense.
El subíndice de producción del sondeo avanzó 1,9 puntos, a 65,8, y una medición de nuevos pedidos se disparó 5,4 puntos, a 69,4. Los manufactureros también reportaron un incremento en los pedidos de exportaciones.
Las manufacturas en el país probablemente tendrán un nuevo impulso este año a partir del recorte impositivo de u$s 1,5 billones aprobado el mes pasado por el Congreso.
Los reportes de manufacturas y construcción se sumaron a datos desde el mercado laboral, a casas y gasto del consumidor que mostraban un panorama sólido para la economía estadounidense.
Las estimaciones del Producto Interno Bruto (PBI) para el cuarto trimestre convergen alrededor de un 2,8% a tasa anualizada. La economía estadounidense creció a un ritmo de 3,2% en el tercer trimestre.
Fuente: El Cronista