Aunque por el clima no lo parezca, hace un tiempo que ya entramos en el otoño, una estación que trae consigo distintos colores apropiados para decorar la casa. Ejemplo de ello son los marrones, los ocres, mostazas, verdes, amarillentos, rojizos, naranjas o cremas.

Para decorar la casa se pueden utilizar objetos que ya se encuentran en ella, como una chimenea a leña, la cual generará una sensación agradable y cálida. Lo mismo puede ocurrir con hojas caídas, piñas o ramas secas para convertirlas en piezas decorativas, como centro de mesa.

Los frutos secos son típicos de esta época, como castañas, nueces, almendras y avellanas, que pueden servir también como centro de mesa.

Por otro lado, es el momento adecuado para reemplazar los tejidos ligeros por otros más pesados que trasmitan calidez y confort como la lana o la imitación de piel de oveja, añadiendo textura.

En cuanto a la iluminación, se pueden utilizar velas para darle una mayor calidez al hogar con espacios sosegados y agradables.

El verde es otro de los colores del otoño y es por eso que uno de los mejores objetos para decorar la casa son las plantas, para no perder el contacto con la naturaleza y darle una vibra especial al lugar.

Fuente: Clarín