Cualquier ingeniero proyectista de puentes soñaría con realizar una pasarela colgante de 200 metros de luz en cualquier desfiladero de Asia o Latinoamérica. Toni Ruttimann, “el Suizo”, tiene en su haber casi 600 pasarelas en todo el mundo construidas con una única finalidad: cubrir una necesidad, unir a una comunidad y mejorar la vida de las casi un millón de personas que circulan ya por estos puentes de la esperanza.

Conocido por muchos como el Puentero Invisible, y viajando por el mundo sólo con un par de mochilas, ha conseguido lo que muchas organizaciones no gubernamentales no han podido lograr: construir puentes que rondan los 600 francos, utilizando tubos de desecho de petroleras o bien cables viejos de teleféricos suizos.

Dejando de lado su labor social (es indudable que él mismo es una ONG en Mayúsculas) lo que  impresiona es su lucha incesante de más de 25 años por conseguir cubrir las necesidades sociales de las comunidades indígenas más aisladas consiguiendo en su hazaña movilizar a empresas proveedoras de tubos de acero y cable como TenarisTamsa o Ternium para generar una cadena de abastecimiento de los pobres, mejorando año tras año el proceso constructivo de sus puentes. Lo fascinante es que él y su pequeño equipo han logrado “industrializar” el proceso de construcción, minimizando el tiempo de ejecución de los mismos y naturalmente los riesgos durante su construcción. Los procesos de ensamblaje, o bien de izado, son increíblemente rápidos y pueden realizarse sin necesidad de grandes equipos mecánicos gracias, entre otras cosas, al trabajo voluntario de la comunidad donde se implanta la estructura.

Éste Suizo de casi 45 años, pese a no tener formación técnica, ha conseguido desarrollar lo que para muchos son las cualidades básicas de un buen ingeniero: ser capaz de crear, desarrollar e implementar estructuras que cubran necesidades sociales sorteando limitaciones económicas y de recursos tecnológicos… y todo ello a cambio de NADA.

Más información:

www.puentesdelaesperanza.org

Fuente:

www.construcloud.com