Luego del invierno es importante planificar cómo volver a revivir los jardines y terazas.

Una buena elección de las plantas que se coloquen condicionarán los posteriores cuidados.

Algunas especies son lo suficientemente resistentes como para durar de un año a otro.

Aquí algunas de ellas:

 

Hortensias

También conocidas como hydrangeas. En climas templados y húmedos toleran bien la sombra, aunque lo que más les va es el sol mañanero. El color de las flores depende del ph del suelo y pueden ser rosas, azules o blancas. Necesitan mucha agua.

 

Geranio

Salvo que un invierno te los fulmine una helada, son una de las plantas de jardín o balcón más agradecidas. Prácticamente crecen sin mirarlas. Necesitan agua, pero tampoco en exceso. Aceptan climas calurosos.

 

Rosal

Con infinidad de variedades, el rosal es otra de esas plantas que se adaptan casi a cualquier rincón y sus flores son una delicia. Hay que recordar podarlos un poco en invierno, antes de que rebroten y hay que regarlos con frecuencia en verano. Más allá de eso, guiarlos para que vayan creciendo por donde queremos que crezcan… o dejarlos, para que se conviertan en un verdadero arbusto.

 

Verbena

La verbena es una planta rastrera con unas flores muy pequeñas pero muy abundantes que están dando flor desde primavera hasta bien entrado el otoño. Se dan mejor en sol y sombra o con sol de mañana. Y no pasarse con el agua.

 

Clavel

Los claveles huelen maravillosamente bien. Su reproducción es por esquejes, sencillísima. De un trocito de tallo sale todo un plantón. Resisten el sol y también la sombra y, aunque en invierno no salen flores, la planta es resistente a las heladas moderadas. Florece a partir de abril-mayo.

 

Calas

Un bulbo al que le gustan las zonas umbrías y húmedas. En primavera crecen unos tallos verdes con hojas grandes y de un verde muy intenso y a continuación florece y está floreciendo hasta final del verano. No requiere grandes cuidados, excepto el riego frecuente y estar a la sombra.

 

Tulipanes

Otro bulbo. La pena es que son de vida breve… pero intensa, eso sí: florecen sobre abril-mayo. Primero les salen las hojas, que permanecen verdes aunque la flor se haya marchitado y, a continuación sale la flor, que dura unos quince días. Florecen una vez al año.

 

 

Lavanda

Otra planta bien agradecida. Soporta heladas moderadas, sequías, lluvia… de todo. Mejor al sol.

 

Abelia Confetti

Es un arbusto rastrero con hojas pequeñas y flores más pequeñas aún, de color blanco. Es muy resistente a las inclemencias meteorológicas.

abelia

Hiedra

Un clásico. Mejor en zonas de sombra, aunque tolera el sol. Se debe procurar elegir una especie que sea perenne, si no, en otoño quedará desnuda la pared.

 

Margaritas

Desde principio de primavera hasta casi casi el invierno, una alegría en la terraza o el jardín. De día se abren y de noche se cierran. No es que tengan un olor especial, pero son muy bonitas y están floreciendo durante muchos meses. Hay que vigilar el riego.

 

Pasionaria

Otra trepadora, en este caso anual, es decir, que muere en invierno y renace en primavera. Las flores son realmente espectaculares y los frutos se conocen como “fruta de la pasión”, son de color anaranjado.

 

Fuente:

www.unadocenade.com