Suecia desarrolla turbinas en forma de barriletes para generar energía en forma eficiente y barata. Los dispositivos se anclan en el fondo del mar y funcionan como molinos, haciendo girar sus aspas en la dirección de los flujos oceánicos.
Uno de los recursos energéticos menos explotados es el que puede generarse a partir de las corrientes marinas.
De hecho, hay muy pocas turbinas que producen energía en las profundidades de las aguas aprovechando las corrientes, y la mayoría de ellas funcionan como molinos, con sus aspas girando en función de la dirección de los flujos oceánicos.
Pero durante el verano boreal se pondrá a prueba en el Reino Unido un nuevo tipo de generadores que prometen avances importantes en esta tecnología.
Investigadores de la compañía Minesto en Suecia han desarrollado una turbina en forma de cometa (o barrilete) anclada en el fondo del mar por medio de un cable. El dispositivo surcará las profundidades del océano para generar energía de una forma más eficiente y barata.
En el desarrollo de las turbinas submarinas participan también la Universidad Tecnológica de Chalmers y la compañía multinacional Saab, ambas de Suecia.
Estas turbinas en forma de cometas pueden aprovechar las corrientes marinas que se desplazan a una velocidad menor, algo que no pueden hacer otras tecnologías que aprovechan los flujos marinos.
En otras palabras, la cometa podrá generar energía a partir de corrientes que se desplazan entre 1 y 2,5 metros por segundo, mientras que otros dispositivos menos avanzados requieren 2,5 metros por segundo para producir la misma cantidad de electricidad.
Las turbinas convencionales funcionan en base a muy altas velocidades de desplazamiento de la marea en puntos clave en todo el planeta.
Este nuevo desarrollo permite operar turbinas en zonas de menores velocidades y hacerlo conjuntamente con otro tipo de turbinas, con el fin de garantizar un mayor aprovechamiento del potencial energético de las corrientes marinas.
Por otra parte, su construcción es mucho menos costosa, ya que los generadores en forma de molinos pesan entre 200 y 300 toneladas por megavatio producido. Las nuevas turbinas pesan 14 toneladas por megavatio y generan más electricidad.
Si se comparan con las turbinas eólicas, la razón por la que éstas se construyen lo más grande posible es porque abarcan un área mayor y así producen más energía. La ventaja de las nuevas cometas es que son más pequeñas y pueden recorrer un área mucho mayor. De manera que, a un menor costo, producen una gran cantidad de energía
Un gran número de estas turbinas en forma de cometas se instalarán por primera vez en Irlanda del Norte en el verano boreal, pero hay planes para colocarlas en otras zonas marinas del Reino Unido, Estados Unidos e Italia.
Para ilustrar la capacidad de generación de esta tecnología, en Irlanda del Norte, las cometas cubrirán un área marina de tres kilómetros cuadrados y generarán electricidad para cubrir la demanda de entre 1.500 y 2.000 hogares.
La cometa se moverá en un radio de entre ocho y 14 metros y estará conectada a una turbina que está debajo de ella.
Además, estará sujeta al fondo del mar por medio de un cable y ondeará con un movimiento parecido al del número ocho, con el fin de multiplicar por diez la velocidad del agua que fluye a través del generador.
Esto implica que la cometa producirá energía renovable al aprovechar las corrientes marinas relativamente más lentas.
Dependiendo de la ubicación y el tamaño de la turbina, ésta tendrá una capacidad de entre 100 y 850 kilovatios y podrá ser colocada en profundidades de entre 50 y 120 metros.
Fuente: diarioecologia.com