La Mezquita del jeque Lotf Allah o el oratorio del Shah es una de las mejores obras de la cultura iraní, fue construida cuando aún prevalecía la dinastía safávida. Está situada en el lado este de la plaza de Naghsh-i Jahan en Isfahán, Irán.

Es una mezquita alta construida en siglo XVII (1615) por las órdenes de Shah Abbas I, bajo el reinado de los safavides. Está sobre la primera mezquita erigida en esta ciudad por los safavides, antes de la mezquita del Shah. Su construcción duró un largo plazo de tiempo, dieciséis años según fuentes, y dos fechas se colocan en la decoración: 1616 en la bóveda y 1618 en el mihrab. El arquitecto (Mimar) del edificio fue Muhammad Reza ibn Ustad Hosein Banna Isfahani y el calígrafo Ali Riza-i Abbassi, ellos acabaron de contruirla en el año 1618. Es necesario distinguir del pintor, del calígrafo y del proyectista famoso Riza Abbasi activo al mismo tiempo.

La decoración de esta mezquita pequeña, que realmente fue utilizada como oratorio para el soberano más que de lugar del rezo público, se realizó bordeando de cerámica los puntos más bajos y de mármol amarillo los superiores. En la mezquita, es el azul que domina, con las adiciones de verde, amarillo, rojo y turquesa, pero afuera, en la bóveda, una observa el uso de una plataforma muy particular, con un predominio del amarillo que existe solamente en este edificio en este período y podría quizás recordar la bóveda de la tumba de Ismail I a Ardabil.

Es notable la decoración interior de la cúpula por el uso de la luz que viene del exterior, que refleja en la cúpula y remonta la cola del emblema real de los persas, pero que figuran como cualquier otro animal u hombre y que fue prohibido en una mezquita.