A principios de 2013, se inauguró el primer museo del video juego en la Ciudad de México, el cual está ubicado en el interior de una de las tiendas de la cadena GAMERS en el centro del DF. El objetivo del museo es mostrar un recorrido por la historia del video juego desde sus inicios a mediados del siglo pasado hasta nuestros días.

“El mayor reto fue iluminar un espacio pintado totalmente de negro” dice la Arquitecta Giselle Morgado.

El museo esta insertado en un antiguo edificio sobre el Eje Central, casi a la altura de la Torre Latinoamericana, por lo que fue necesario remodelar todo el interior del local que anteriormente fue una tienda de ropa.

El diseño de interiores estuvo a cargo de la constructora BAI y  Klinai Alter Mobilli quienes tuvieron como idea principal crear la sensación de estar en el interior de un videojuego al recorrer el museo. La iluminación jugó un papel fundamental en el diseño ya que fue uno de los medios a través de los cuales se obtuvo el ambiente deseado.

El diseño de iluminación estuvo  a cargo de la arquitecta Giselle Morgado quien comenta que el mayor reto fue iluminar un espacio pintado totalmente de negro lo cual era un requisito indispensable para crear la atmosfera mencionada. Por otro lado el tema del ahorro de energía fue fundamental ya que no existe iluminación natural en el interior del museo por lo que las luminarias deben estar encendidas durante todo el tiempo de funcionamiento.

Para estos fines se utilizó la tecnología LED en la mayoría de los equipos así como fluorescentes T5 en colores cálidos y fríos para establecer contrastes interesantes. En la primera parte del museo, donde aparece un texto resumen sobre la historia del videojuego,  se colocaron vitrinas en forma de  cajas de luz donde se exhiben los primeros equipos. En esta zona se dejó a la vista un muro sin aplanar, como muestra del sistema constructivo del edificio, este fue iluminado mediante cinta de LEDs en color cálido que contrasta con el tono frío de las vitrinas.

Para pasar a la segunda parte del museo y enriqueciendo el ambiente lúdico del lugar se creó un umbral que presenta cambio de color mediante cinta LEDs RGB. En esta área se creó una larga vitrina cuyo fondo es un muro luminoso donde aparecen imágenes de los más conocidos  personajes de los videojuegos, este fue iluminado con t5 a 3000 K. Sobre el fondo se colocó un panel hecho a base de hexágonos  de donde surgen repisas de vidrio con iluminación integrada mediante cinta de LEDs en 6500 K, estas sirven de soporte  a las consolas.  El contraste entre el tono cálido de la manta y el frío de las repisas le da el toque final al diseño.

También  se creó un módulo de juegos donde el visitante puede usar temporalmente una de las consolas antiguas y donde fue necesario iluminar solamente el área del control.

Para garantizar la seguridad al caminar se colocaron cajillos lineales a nivel de zoclos a todo lo largo del recorrido así como en los escalones interiores.

A través del diseño de iluminación se pretendió crear un ambiente divertido pero al mismo tiempo cómodo en el sentido de no crear brillos innecesarios ni reflejos desagradables, fueron un verdadero desafío a resolver en un ambiente lleno de contrastes luminosos.

 

Fuente:

www.iluminet.com