¿Viste esos momentos en los que estás por el piso, arrastrándote, con la cabeza baja, cuando no podés levantar la mirada porque alguna nube negra sobrevuela tu realidad? ¿Cuando venís arrastrando el mal humor y casi ya ni recordás qué fue lo que logró irritarte tanto?
Cuando El Espartano y Bamboo se pusieron a pensar sobre las virtudes de los felpudos, descubrieron que son los primeros en dar bienvenidas, o cobijar el primer paso junto a la cama (con el pie derecho) además de protegernos de un desliz a la salida de la ducha.
Hoy te presentamos la nueva línea de felpudos que buscan plasmar la filosofía optimista que prima en esta alianza entre El Espartano y Bamboo; quienes por supuesto, gozan de días buenos y no tan buenos, pero que siempre buscan un efecto transformador poderoso, porque estan convencidos de que los medios vasos siempre están llenos.
Los bebés de la casa hacen ahí su nido e incluso, ese adorable amigo fiel, que debería traerte las pantuflas después de haberte destruido el sofá con cara de “yo no fui”, suele echarse sobre ese espacio mullido que lo hace sentirse seguro. Los felpudos son elementos claves en la cotidiana funcionalidad del hogar y se decidieron a resignificarlos.
Así, con ganas de que vuelva la esencia al felpudo de entrada, aquel que profesaba un “Bienvenidos” o un“Hogar dulce Hogar”; esa primera huella que demarcaba que estabas llegando a donde todos sabían tu nombre, ese lugar en el que te reencontrabas con tu esencia íntima. Porque en tiempos en el que todos te ofrecen básicos modernos, nos recuerdan que para básicos, la fórmula perfecta sigue vigente ahí donde las cosas ocurren, y el papel protagónico es tuyo y de los tuyos.
Para que en el hogar nada nos haga ruido, porque ese ruido distorsiona la llegada del mensaje, y el mensaje debe ser claro. El Espartano creó su Laboratorio de Diseño y Sustentabilidad, un espacio de experimentación en el que un colectivo de artistas invitados busca resignificar materiales en desuso. De esta manera, el objeto resignificado es el portador del mensaje de optimismo, casi como un metamensaje. Y se une a Bamboo, una revista para leer, para profundizar ese camino de búsqueda de experiencias que te sumen, que te den algo más, manteniendo la simpleza y encontrando la belleza en esos hábitos que amamos y que los tiempos frenéticos que corren nos hacen dejar un poco de lado.
La colección presenta una línea pensada para el interior que tiene como eje temático el mensaje optimista y que resulta ideal para espacios como el hall de recepción, el pie de cama o la salida de la bañera. Estos felpudos se convierten en un detalle personal, creativo, sutil y con un efecto transformador poderoso.
Ellos esperan que cuando pisemos el felpudo descubramos que el día puede ser un poquito mejor. Resignifican el felpudo con la intención de que la casa recobre la esencia de un hogar, repleto de recuerdos de los viejos nuevos tiempos.
Vos, pisá con ganas este mensaje que ya nada te va a hacer ruido.Gracias Espartano por recuperar los felpudos!